Si alguna vez has cambiado el seguro del coche, puede que las preguntas sobre partes de siniestros te hayan hecho pararte a pensar. Independientemente de la compañía, correduría o comparador de seguros online que elijas, estas preguntas estarán siempre ahí. Lo que no te suelen decir es que las aseguradoras consultan bases de datos externas para verificar que has respondido con la verdad. El más importante es el fichero SINCO, ya que es usado por la mayoría de aseguradoras. ¿Pero sabías que tú también puedes acceder a la información que tienen esas bases de datos sobre ti? Sigue leyendo para saber cómo consultar el fichero SINCO y conocer la información de siniestralidad sobre ti que tiene registrada.
Por el principio: Qué es SINCO
No es raro tener a las espaldas siniestros con culpa sin saberlo. Pueden deberse a no saber que se te identificó como culpable, a un parte amistoso mal rellenado, o a algo que tú ni siquiera consideraras un siniestro.
El fichero SINCO es un registro externo a las aseguradoras, en el que figuran las pólizas de seguros y los siniestros con responsabilidad civil que van asociados a ellas. Lo gestiona la empresa TIREA, siglas de Tecnologías de la Información y Redes para las Entidades Aseguradoras. Tienes mucha más información sobre SINCO y sobre cómo afecta a los precios en este artículo.
El funcionamiento de SINCO es sencillo: las aseguradoras aportan datos de los accidentes que han provocado sus clientes, y a cambio pueden consultar la información de siniestralidad de sus posibles clientes antes de asegurarles. Esto permite a las compañías comprobar que las declaraciones de datos de esos posibles clientes son realistas, y ajustar el precio por hacerles una póliza. Es por ese motivo por el que siempre te recomendamos ir con la verdad por delante al comparar seguros de coche. Todo puede comprobarse.
Acceso a tus datos en SINCO
TIREA, como cualquier otra entidad que trabaje con datos identificativos de personas, debe facilitártelos siempre que lo pidas. El motivo son sus obligaciones de protección de datos, pero tú también puedes sacare provecho a esta consulta de cara a tu seguro. Desde informar correctamente de tus siniestros pasados al cambiar de compañías, hasta que las subidas de precio por pérdida de bonificaciones no te pillen por sorpresa. ¿Quieres más motivos? Sigue leyendo.
¿Por qué consultar tu historial de siniestralidad?
Puedes pensar que no necesitas consultar ninguna base de datos para saber qué partes has dado a tu compañía. Al fin y al cabo, ¿cómo no saber qué es un accidente? Pero te adelantamos que la realidad puede sorprenderte.
El sector asegurador en España no es famoso por su transparencia. Y, obviamente, todos sabemos que si tenemos un choque en un cruce porque el otro coche entró aunque tú venías por su derecha, eso es un siniestro sin culpa. Pero, a lo mejor, resulta que ese otro coche se encontraba en una vía principal de un ciudad en la que solo estabas de paso, y no sabías que debías cederle el paso tú y no al revés. ¿Cómo gestionan esto las aseguradoras?
En realidad, no es raro tener a las espaldas siniestros con culpa sin saberlo. Puede deberse a la situación del ejemplo de antes, a un parte amistoso mal rellenado, o a algo que tú ni siquiera consideraste que fuera un siniestro. ¿Sabías que si dañas mobiliario urbano, por ejemplo el jardín interior de una rotonda, y te identifican y te multan por ello, tu aseguradora se hace cargo del arreglo? Aunque en el momento tú solo seas consciente de la multa, tu seguro tendrá en cuenta este siniestro y lo notificará a TIREA para incluirlo en el fichero de siniestralidad. Y, por supuesto, esto forma parte de su operativa rutinaria, te informaron de que podían hacerlo en el condicionado general y no tienen por qué avisarte cada vez que aportan información a SINCO.
Así que no te viene mal, de vez en cuando, consultar el fichero SINCO en calidad de asegurado, y saber qué datos de siniestros tienes asociados. Tal vez la respuesta que recibas de TIREA te sorprenda. Y, en caso de que te respondan lo que tú esperabas, te dará la tranquilidad de saber que no vas a llevarte sorpresas desagradables con tu seguro.
Cómo consultar el fichero SINCO
Antes de empezar esta guía, queremos advertirte: el proceso puede ser largo y poco intuitivo. Como los destinatarios de la información sobre siniestralidad son las aseguradoras y no los conductores, y además estos últimos no suelen saber ni que este fichero existe, la forma de consultar datos de siniestralidad no se ha actualizado en mucho tiempo. Pero precisamente para eso hemos escrito guía: para ayudarte a obtener tu historial de siniestralidad y que puedas contratar tu próximo seguro de coche sin temer cambios en el precio.
El punto de partida de este trámite será la Web de TIREA. En ella, desde el apartado de Información para Asegurados, podrás moverte a todas las páginas que necesitas para consultar tu información de siniestralidad como conductor. Desde un resumen de la información y los objetivos de las bases de datos gestionadas por TIREA, hasta la forma de contactar con ellos y solicitar tus datos. Aun así, en esta guía tienes enlaces a todo lo que necesitarás para consultar el fichero SINCO.
Descarga la plantilla de ejercicio de derecho
El primer paso para consultar tu historial de siniestralidad será obtener el formulario estándar que TIREA usa para las solicitudes. Podrás encontrarla en la sección “Plantillas ejercicio de derecho SIHSA”.

Sí que es cierto que, en la documentación de TIREA, no dicen que sea obligatorio usar su modelo estándar. ¿Pero para qué complicarte la vida? Te resultará mucho más sencillo descargar su plantilla de solicitud y rellenarla con los datos que te piden. De esta forma te aseguras de que cumplirás los requisitos que te piden para el trámite.
Para saber tus datos de siniestralidad, el modelo que te interesa es la plantilla que se llama Ejercicio derecho de acceso SIHSA-SIAPETRI, que también puedes obtener aquí.
Rellena y firma el formulario
Una vez tienes el formulario correcto para solicitar la información que TIREA tiene sobre ti, deberás rellenarlo y firmarlo. Los datos mínimos necesarios son nombre, DNI y lugar de residencia. Con ellos deberían poder encontrar tu ficha en su base de datos. TIREA indica en su web que, si también das información de vehículo y número de póliza del seguro, te encontrarán más fácilmente. Sin embargo, estos datos no son necesarios.
Si eres un particular pidiendo sus propios datos, debes dejar el apartado de Representante Legal en blanco para no crear confusión. En cuanto a los fichero que puedes consultar, con que marques «El Sistema de Información Histórico de Seguros del Automóvil» es suficiente.
Por último, no te olvides de firmar la solicitud. Como se indica en la propia plantilla, este punto es imprescindible. Si no firmas el formulario, desestimarán tu solicitud y no podrás consultar tu historial de siniestralidad.

Envía el formulario y una copia de tu DNI
A continuación, deberás hacer llegar la documentación necesaria a TIREA. Tienes tres formas de hacer esto: llevando los papeles en persona a la sede de TIREA en Las Rozas, enviándolo por carta, o mediante correo electrónico. En pleno siglo XXI, la forma más sencilla, barata y rápida será enviarles un email en el que adjuntes los papeles que te piden. La dirección para hacer solicitudes de datos es Centro.Operaciones@tirea.es.
Deberás enviar el formulario que has rellenado y una copia de tu DNI o NIE por las dos caras. Desde TIREA remarcan que es muy importante que el escaneo o la fotocopia del documento de identidad que envíes esté nítida y que tanto tu foto como el texto se puedan leer de forma clara. Si no, les resultará imposible identificarte, y no te enviarán tus datos de siniestralidad.
¿Cuánto tardará TIREA en responderme?
En la web de TIREA indican que se comprometen a responder tu solicitud en un plazo máximo de 30 días naturales (es decir, de lunes a domingo sin saltarse los festivos) desde que reciban tus documentos. Si envías todo por correo electrónico, serán 30 días desde que pulses el botón de enviar. En nuestra experiencia, suelen responder consultas de particulares en menos de una semana.
Sabemos que este plazo es amplio y, si necesitas saber qué datos de siniestralidad tienen de ti las aseguradoras, probablemente te urja. Pero TIREA solo acepta consultas por estos medios, ya que no consideran que el teléfono sea una vía segura para identificarte, y de momento no ofrecen un portal para consultas de particulares por internet. Deberás tener paciencia al solicitar tu información de siniestralidad, y enviar la solicitud con tiempo si la necesitas para cambiar de seguro.
¿Y si consulto el fichero SINCO como empresa?
Si tienes una empresa con flota de vehículos, o eres autónomo y usas un vehículo en tu actividad laboral, el procedimiento para consultar la siniestralidad cambia un poco.
En este caso, deberás rellenar el apartado de Representante Legal con los datos de quien tenga esta función en la empresa (si eres autónomo, tú mismo).
Además, también deberás adjuntar copias del CIF de la empresa, de la escritora pública de apoderamiento y de los permisos de circulación de los vehículos con póliza de seguros en vigor que quieras consultar.
El resto de pasos para enviar la solicitud, desde el formulario que debes usar hasta la dirección de correo electrónico de destino, serán los mismos que hemos visto hasta ahora.
Consultar fichero SINCO: Conclusión
Ahora ya sabes cómo consultar el fichero SINCO y, así, obtener tu historial de siniestralidad como conductor. Tal vez el proceso se te haga un poco tedioso, pero te permitirá saber qué información manejan las aseguradoras sobre ti y evitarás llevarte sustos a la hora de cambiar de seguro.
Y, una vez tengas tu información de siniestralidad, podrás comparar seguros de coche con datos precisos e ir directo a las tarifas que te ofrecen precio garantizado. Comparar seguros es la manera más cómoda, rápida y barata de encontrar el seguro que más se adapte a tus necesidades. A través del comparador de precios CHECK24 podrás realizar toda esta gestión de forma fácil y cómoda. Aprovecha y revisa el precio de la póliza de tu coche y, ¡empieza a ahorrar!